Había que ganar y ganó. El Córdoba, a base más de casta y de garra que de fútbol, logró remontar ante el Castellón, que complicó las cosas en que se adelantó por medio de Cipenga y logró que su rival se fuera abucheado por su propia afición. Luego, a partir de un penalti forzado con inteligencia por Sergi Guardiola, todo cambió, hasta que pudo llegar el 2-1 de Kevin Medina. Hubo que su
Para seguir leyendo suscríbete
¿Ya estás suscrito? Inicia sesión
Opciones de suscripción
Cuatrimestral 2025
12,25€
12,95€
Cada 4 meses
Pago recurrente
12,25 € cada 4 meses (periódica)
PROMOCIÓN VÁLIDA HASTA EL 1 DE ENERO DE 2026