En los últimos años, en la comunidad andaluza nos hemos acostumbrado a tener equipos en las máximas competiciones europeas u ocupando las posiciones altas de la tabla en primera división. En esta temporada, los resultados de la Liga Santander, están demostrando que ningún equipo debe confiarse en sus posibilidades, aunque en otras temporadas haya estado ocupando posiciones punteras en la competición doméstica.
Ese es el caso actual del Sevilla FC. Una escuadra llamada a hacer grandes cosas en forma de estar sí o sí en posiciones de acceso a competición europea, y que este año mira con recelo hacia un descenso que supondría una noticia nefasta para el club. Hace no tanto tiempo que el conjunto hispalense tuvo que pelear un ascenso en segunda división. Temporadas que la afición no quiere volver a sentir, y que si no se atina en estas últimas jornadas puede volver a llegar.
El efecto Sampaoli
La llegada de Sampaoli al banquillo sevillista no ha tenido el efecto deseado. Son varios meses comandando la nave hispalense con escaso resultado. Hecho que no ha pasado desapercibido entre la afición, que están lanzando una corriente sobre un cambio de técnico más que necesario, a su entender.
En este sentido, el duelo de la próxima jornada ante la UD Almería en el Sánchez Pizjuán, se antoja vital para el futuro del Sevilla FC. Dos equipos empatados a puntos con las posiciones de descenso, por lo que el valor de este partido no solo serán tres puntos. El equipo que no consiga el objetivo, saldrá muy lastrado para afrontar lo que resta de curso, y, además, es previsible que termine esta nueva entrega, el domingo, en puestos de descenso a la segunda división del balompié español.
Andalucía se encuentra con la tesitura de contemplar como dos de sus representantes coquetean con el descenso de categoría. La situación de la UD Almería era previsible al inicio de curso, pero lo sorprendente es lo que están viviendo en el Sevilla FC.
Una escuadra, la hispalense, llamada a principio de temporada a luchar por clasificarse para la UEFA Champions League. Un inicio dubitativo, y la venta de piezas clave, especialmente en defensa, ha hecho al cuadro hispalense llegar a esta situación. Una pesadilla de la que toda la afición quiere despertar, pero que todo indica que se alargará hasta los últimos compases de curso.
Quedan unos meses apasionantes, en los que el Sevilla FC puede redimirse de la temporada tan nefasta que está haciendo hasta el momento. Las prestaciones de todo el equipo deben aumentar, sino quieren verse abocados a caer en el pozo de la Liga SmartBank.