Anticimex es una compañía especializada en control de plagas y sanidad ambiental que cuenta con un equipo multidisciplinar de expertos que trabajan constantemente para ofrecer las soluciones más eficaces, innovadoras y sostenibles, tanto para la prevención, el control y la eliminación de plagas, como para la desinfección e higienización de espacios. Asimismo, con su estrategia de negocio Visión Zero, la compañía muestra su compromiso con el entorno medioambiental y social, aplicándolo a toda su cadena de valor y luchando, de este modo, por un futuro de Zero emisiones, Zero tóxicos y Zero desigualdades. Un compromiso que también lleva al mundo del deporte velando por espacios libres de virus en las instalaciones deportivas.
El delegado en Andalucía – Córdoba, Segundo García, atendió la llamada de Cordobadeporte para explicar cómo en la etapa post pandemia se desarrollan sus servicios aplicados en los grandes estadios deportivos.
¿Cuáles son las demandas más recurrentes de las instalaciones deportivas en el campo de control de plagas y sanidad ambiental?
Los espacios deportivos tienden a ser grandes instalaciones con rincones ocultos y de difícil acceso que son perfectos para atraer y albergar todo tipo de plagas. Las más frecuentes suelen ser las cucarachas, los roedores, las hormigas y los insectos voladores. Además, cuando hablamos de polideportivos cerrados donde se concentra una gran cantidad de personas, estos también presentan necesidades relacionadas con el tratamiento de la calidad del aire interior, un aspecto esencial para garantizar la salud pública.
Por otro lado, las instalaciones deportivas suelen tener zonas de vestuarios (con duchas) para sus usuarios, por lo que también deben cumplir con la normativa relativa a la prevención y control de Legionella, para asegurar la seguridad y salud en los centros deportivos a la vez que minimizan el riesgo de contraer legionelosis.
¿De qué manera Anticimex da respuesta a estas necesidades?
En el campo del control de plagas, desde Anticimex ofrecemos una primera inspección técnica que nos permite identificar las zonas de más críticas o de afectación por la plaga. Posteriormente, y en función de la problemática y tipología de la plaga, se aplican las medidas preventivas y correctoras más convenientes a cada situación, ofreciendo, así, un servicio especializado y personalizado a las necesidades de cada cliente. En este sentido, debemos mencionar nuestros servicios Smart, que utiliza innovadores dispositivos que gracias a sus sensores permiten detectar actividad por plagas incluso en los lugares más recónditos de forma constante y con una respuesta proactiva.
Con relación al control del aire interior, Anticimex proporciona auditorias de las instalaciones donde se analizan diversas variables que determinan la calidad del aire que se respira en su interior. Después, se proponen soluciones también basadas en sistemas digitales para monitorizar su calidad constantemente y poder aplicar las medidas necesarias para reducir así el riesgo de transmisión por aire de cualquier tipo de enfermedad vírica.
¿En qué consiste exactamente el servicio Smart?
El servicio SMART utiliza dispositivos digitales desarrollados con la tecnología más puntera para garantizar un control digital de plagas óptimo y totalmente sostenible. Concretamente, se trata de un sistema de trampas automáticas controladas remotamente que detectan y neutralizan la plaga sin recurrir al uso de biocidas. Además, gracias a la monitorización en tiempo real y el seguimiento online garantizan un control continuado y una respuesta inmediata en caso de necesidad. Cabe destacar, que estos sistemas se aplican al control tanto de roedores, como de insectos como las cucarachas.
En cuanto a la prevención y control de la Legionella, también hemos avanzado con las soluciones Smart. En Anticimex tenemos implantado sistemas que permiten la monitorización en continuo de las temperaturas de los sistemas de agua caliente sanitaria, especialmente en acumuladores con retorno. Estos sistemas Smart en remoto permiten al cliente comprobar que su sistema cumple con las temperaturas establecidas en la normativa para la prevención y control de Legionella en todo momento.
Y en el ámbito de la calidad de aire en interiores, ¿qué soluciones ofrecéis?
Al servicio de auditoria previa que ofrecemos desde Anticimex, y que realiza un diagnóstico del nivel de calidad del aire interior, debemos añadir los sensores Smart CAI, los cuales proporcionan un control continuo del caudal de renovación del aire por ocupante, los niveles de CO2, la temperatura y la humedad. Gracias a estos sensores, los establecimientos son capaces de monitorizar la calidad del aire interior y valorar, así, el mejor momento para ventilar, e incluso, si es necesaria la aplicación de otras medidas.
Por otra parte, la solución Air-Purifier, tal como su nombre indica, purifica hasta 500m3/h de aire interior y elimina rápidamente virus, bacterias, alérgenos y contenientes químicos en los espacios cerrados gracias a un sistema de filtración HEPA con una eficacia testada del 99,9%.
¿Cuál es la importancia de una buena desinsectación e higienización de los espacios deportivos?
Sufrir una plaga de insectos o cualquier otra afectación provocada por la falta de desinfección puede ocasionar desde riesgos para la salud de empleados y visitantes, hasta un escándalo de reputación que puede dañar por completo la imagen del centro y sus futuras acciones. Además, también debemos tener en cuenta que plagas como las de roedores y cucarachas también pueden provocar daños materiales que afecten a las instalaciones eléctricas e incluso a la estructura de misma la instalación. Por tanto, contar con un buen servicio de control de plagas e higienización de espacios resulta un aspecto clave para garantizar la salud pública.
¿Cómo afrontáis desde Anticimex el futuro del sector de control de plagas e higiene ambiental?
Desde Anticimex se quiere participar activamente en la evolución sostenible del sector e impactar positivamente en la sociedad, el medio ambiente y las personas. En esta línea, pues, apuesta por la tecnología, la innovación y la sostenibilidad como aspectos clave para conseguir esta transición y, por ello, trabaja decididamente en el desarrollo constante de nuevos métodos, técnicas y equipos digitales que cubran las necesidades del mercado, manteniendo siempre el mínimo impacto posible, pero con la máxima eficiencia.