La ciencia recomienda una dieta saludable y una práctica regular de ejercicio físico. El primer elemento de esta ecuación concierne a otras secciones alimenticias (diremos que ajustarnos a la dieta mediterránea), pero la práctica de actividad física sí nos corresponde. Aparte de una lectura de noticias deportivas, conviene, al menos, cumplir con esa regla de alcanzar andando los 10.000 pasos diarios. Alternando unos pasos sosegados con otros a mayor ritmo. Andar no solo consiste en esto, sino también en portar una ropa deportiva adecuada a esta actividad física, por lo que la elección de los chándals hombre es fundamental.
La mencionada prenda deportiva atraviesa una época dorada, no solo por el aumento de personas que realizan algún tipo de actividad física, sino porque la reciente pandemia ha desencadenado en el uso del chándal como vestimenta para permanecer en casa. El motivo es sencillo: nos sentimos cómodos. Y, precisamente, este es el primer objetivo (aparte de otros elementos que detallaremos a continuación) que debe valorarse a la hora de comprar un chándal; y como sucede con otras ropas o complementos destinados a la práctica activa de ejercicio físico, se aconseja acudir a tiendas especializadas como Décimas.
El tipo de tejido: la clave
La compra de un chándal no debe circunscribirse a elementos banales como el diseño, el color e incluso el tipo de marca; sino a otros factores que nos ayudarán a estar cómodos y potenciar esa versatilidad (puede combinarse fácilmente con otras prendas y complementos) que otorga esta prenda. No es lo mismo elegir un chándal para época de invierno (deberemos fijarnos en su grosor) que en una época de temperaturas más benévolas. De manera general, nos podemos encontrar chándales fabricados en los siguientes tejidos: algodón, nailon y poliéster.
El precio es otro elemento de valor. En función del presupuesto, deberemos escoger un chándal que no sea excesivamente barato. De esta forma, estaremos comprando una prenda de calidad en cuanto a la tela y forro empleado, así como al cosido que llevarán las costuras de estas, asegurándonos una mayor durabilidad. Que lleve cremalleras, bolsillos o un tipo de ajuste mayor o menor en los tobillos son otros factores que favorecen que estemos cómodos.
Estos factores generales deberán ponerse en práctica tanto para elegir el pantalón como la chaqueta o sudadera, ya que esta prenda se divide en dos piezas. En este sentido, el pantalón puede ser más o menos ajustado, siendo esta última característica más favorable a aquellas personas que deseen moldear su figura en detrimento de la comodidad que otorga un pantalón suelto; y la chaqueta, a diferencia, de la sudadera, nos permitirá la entrada de aire con mayor facilidad en cuanto tengamos un aumento término. Esto entronca con otro elemento clave como conocer si el tejido del chándal es transpirable, lo que nos ayudará a estar más confortables en nuestra tarea de andar los 10.000 pasos.
Beneficios de los 10.000 pasos
Este objetivo, como recalcan los diferentes estudios médicos, está al alcance de todas las personas, tanto jóvenes como mayores, aunque en el caso de los primeros se recomienda la realización de actividades aeróbicas. En cualquier caso, el objetivo de llegar a los 10.000 pasos nos conllevará unos beneficios muy saludables: menor riesgo de enfermedades cardiacas; control del peso; evitar la diabetes; aumentar la autoestima en lugar de padecer episodios depresivos y mantener una óptima presión arterial.